En el primer paso de esta receta casera de atole de guayaba, debes hervir el agua durante diez minutos. Una vez que su agua esté hirviendo, agregue las guayabas a la olla. Puede tomar hasta veinte minutos hervir las guayabas hasta que estén lo suficientemente blandas. Cuanto más tiempo las dejes hervir, más ácido pierden las guayabas.
Deje que las guayabas se ablanden en la olla de agua caliente. Algunas personas durante el segundo paso quitan las semillas o pelan las guayabas, pero a mí me gusta mezclar todas estas texturas.
El tercer paso de esta recesta casera de atole de guayaba es licuar las guayabas. En una licuadora, mezcle y mezcle las guayabas cocidas y ablandadas y una pequeña cantidad del agua sobrante. No agregue demasiada agua. Solo vierta una pequeña cantidad de agua para que la licuadora no tenga problemas para licuar las guayabas. La textura será suave, con algunas semillas partidas.
Una vez que las guayabas terminen de hervir y licuar, puedes agregar la mezcla en la misma olla. Vierta el agua antes de usar la olla. A fuego medio a alto, hierva la mezcla de guayaba y el resto de los ingredientes lentamente. Debe comenzar a espesar rápidamente.
Mientras sigue el cuarto paso de esta receta casera de atole de guayaba, deberá batir o revolver los ingredientes hasta que la mezcla esté espesa, pero suave. Debe verse como harina de maíz, pero con un ligero tono rosado.
El paso más importante en esta receta casera de atole de guayaba es remover la mezcla. Tan pronto como el atole de guayaba casero espese, debe bajar el fuego. No apagues el fuego de la estufa, solo ponlo bajo. Usando una cuchara de madera o un batidor, revuelva rápidamente el atole de guayaba.
Si no revuelve rápidamente esta deliciosa y cálida bebida, puede correr el riesgo de quemarse y llenar demasiado la bebida en la olla. Me encanta darle algunos toques finales a mi receta casera de atole de guayaba. Si tiene aderezos como canela o coco, espolvoréelos encima de su bebida caliente y ¡disfrútelo!